miércoles, 24 de agosto de 2011

Aquí no se tira ná!

Cientos de blogs, artículos y noticias sobre el tema de esta entrada llenan las páginas virtuales de este mundillo que es internet; las recomendaciones se cuentan por millares, por millones seguramente, y prácticamente todas opinan lo mismo: "¡Espectaculares!", "¡De lo más recomendables", "¡Están buenísimas!", "¡Son lo más!", etc, etc... Como yo no podía ser menos también tenía que probarlas, no tenía intención de esperar mucho más. Y con la excusa de la visita de mi amiga María, que estaba por mi islita de vacaciones, me puse a preparar las ya súper-famosísimas BIZCOBOLAS! Y fue todo un acierto, la verdad. No es que me complicara mucho, porque aproveché tooooodos los restos dulces que tenía en mi nevera de días anteriores, y el resultado fue muy bueno.
Los detalles:
ASPECTO: estupendo, de lo más creativo porque lo decoras a tu gusto.
PRESENTACIÓN: tanto puestas en cápsulas de papel tipo bombones como pinchadas en un palito tipo piruleta, quedarás como una artista!
SABOR: de lo más resultón, variado y tan dulce como quieras.
DIFICULTAD: poca, aunque es un poco laborioso.
INGREDIENTES: ¡lo mejor! Necesitas la base (restos de bizcocho), el "pegamento" o amalgama para hacer del bizcocho una masa húmeda (nocilla, queso crema, ganaché...), la cobertura (normalmente chocolate de cualquier tipo; experimentaré con más cosas, a ver lo que sale...) y lo que te guste usar para decorar (fideos de colores, confetti de azúcar, corazones , almendra laminada, crocanti, etc). En mi caso, utilicé restos de bizcocho de chocolate para unas con restos de ganaché de chocolate negro y cobertura de chocolate fondant (ya sé, ultrachocolateado, pero el resultado es increíble, aunque no apto para quien no disfrute del sabor intenso a chocolate); para otros usé restos de bizcocho de vainilla y bizcocho de mazapán, queso crema y chocolate con leche para cubrirlas; otros los hice con bizcocho de mazapán con nocilla y fondant con nata para cubrir y los últimos fueron el invento: bizcocho de mazapán con mermelada de melocotón y fondant con nata para la cobertura. ¡Mi catador quiere deciros que todas están riquísimas, pero lo escribo yo porque tiene las manos y la boca llenas de bizcobolas, jeje!
Las cantidades son aleatorias, ya que dependiendo de la humedad de la base dependerá la cantidad de amalgama, a saber: si el bizcocho es muy seco, pedirá más cantidad de "pegamento", aunque si el pegamento es más líquido necesitará menos (no es lo mismo usar queso en crema que mermelada, de la última necesitarás mucha menos cantidad). Como orientación puedes calcular que necesitarás la mitad en peso de amalgama que de base (por ejemplo, 150 gramos de queso crema para 300 gramos de bizcocho). Como consejo, añade primero la mitad de la crema de unión, mezcla bien y vete añadiendo más si lo necesitas poco a poco, removiendo después de cada vez que añadas. La masa resultante debe quedar húmeda, pero no demasiado jugosa; lo sabrás cuando la masa esté maleable, se despegue y no se agriete al trabajarla con las manos, pero tampoco debe soltar líquido para que no se "despachurre" al cubrir las bolitas con chocolate. Ya sabes, la experiencia es un grado, y cuantas más hagas, mejor te saldrán; a priori suena un poco difícil, pero no lo es en absoluto.
EL MEOLLO:
Prepara las cantidades de bizcocho y "pegamento" que vayas a usar antes de empezar, porque el proceso es algo pringoso y no estarás para ir preparando más sobre la marcha. En un bol grande desmiga bien el bizcocho y añade entonces la mitad del "pegamento"; amasa muy bien con las manos y, si es necesario, añade poco a poco más, mezclando y amasando bien hasta conseguir la masa deseada. Mételo en la nevera durante una hora para que coja cuerpo y sea más fácil trabajarla después. Prepara una bandeja con papel de hornear (para que no se peguen las bolitas), y con la masa ya fuera de la nevera forma bolas con las manos de unos 12-15 gramos (para mi gusto éste es un tamaño perfecto para un bombón generoso pero no demasiado grande). Vuelve a meter en la nevera mientras preparas la cobertura; en un recipiente apto para microondas trocea el chocolate que vayas a utilizar y añade media cucharadita de mantequilla (éste detalle le da un brillo a la cobertura espectacular). Calienta el chocolate en tantas de 30 segundos para que no se queme, removiendo cada vez que lo pares hasta que esté bien disuelto. Saca las bolas de la nevera y empieza la operación más delicada: debes bañar cada bola en el chocolate con cuidado de que no se rompan. Yo usé una cuchara y un tenedor (con la cuchara metía la bolita en el chocolate y con el tenedor la sacaba y escurría el chocolate sobrante antes de dejarla de nuevo en la bandeja con el papel de hornear), pero cada maestrillo tiene su librillo. Una vez bañadas en la cobertura podemos decorar (o no ) a nuestro gusto: bolitas o fideos de colores, granillo de almendra, purpurina comestible... ¡imaginación al poder! Reservamos en la nevera un par de horas para que endurezca el chocolate (y ya de paso no tenerlas a la vista para no caer en la tentación, que el motivo de hacerlas es que tienes invitados, ¿recuerdas???? A ver si es posible que queden para el postre...) Y por último, para una presentación "pofesioná", colocamos cada bomboncito en una cápsula de papel para trufas/minimagdalenas y servimos en un platochulodelaleche/fuentedivinadelamuerte.
A mi me quedaron así:


Siento mucho la calidad de las fotos, sé que son pésimas, pero es que casi no me da tiempo de hacerlas. Prometo esmerarme más con las próximas.
La otra opción de presentación es tipo piruleta, que haremos así: antes de bañar las bolas en la cobertura, cogemos unos palitos de piruleta o brochetas de madera, mojamos una punta en el chocolate deshecho y lo clavamos un centímetro y medio aproximadamente en la bolita. Cuando los tenemos todos lo dejamos enfriar para que endurezca el chocolate y se quede pegado el palito, luego bañamos cada bolita en el chocolate, decoramos y enfriamos. Disponemos las piruletas en una bandeja, en cápsulas de papel o dentro de un vaso largo bonito a modo de ramo de flores en un jarrón.

Al acabar esta entrada acabo de descubrir algo que me ha dejado con los ojos como platos: ¡El blog tiene 40 seguidores! Ni en mis mejores sueños habría imaginado que en tan poco tiempo tanta gente que no me conoce de nada decidiera leer lo que cuento aquí. Creo que tod@s los que escribimos en un blog tenemos la necesidad de compartir, de una u otra manera, nuestras vivencias, conocimientos, experiencia... En mi caso, crear este blog fue una forma de devolver a la red todo lo que las maravillosas personas que me he encontrado por aquí han compartido conmigo de manera totalmente desinteresada, y que cada día siguen aportando buenas vibraciones y sonrisas a mi vida. No puedo explicar con palabras lo feliz que me hace que crezca la que llamo, como ya sabéis, mi familia virtual. ¡Millones de gracias por estar a mi lado!

9 comentarios:

Natalia dijo...

Yo por el momento no las he probado pero se ven monísimas así en sus capsulas.

Besitos

Chicunini dijo...

Toma ya, que ricas!!! Nunca las he hecho, pero me animaré.
Sitos

Mercedes dijo...

Nena si que se
lee laborioso, pero yo también tengo mogollón de ganas de probarlas.
Oye pasate por mi blog, que estoy de sorteito, a ver si te interesa.
besos.

Conchi dijo...

Y riquísimas, Lorelai! Te recomiendo de verdad que las pruebes, son un pecadito divino!!!

Conchi dijo...

Chicas, en serio, animaos porque son muy resultonas; a priori parecen complicadas, pero me da que mi explicación ha querido ser clara y ha resultado demasiado larga... ¡Ya me contaréis, espero de verdad que las hagáis!
Mercedes, me voy ahora mismo para tu blog, que yo me apunto a un bombardeooooo!!!!

Anónimo dijo...

¿Te puedes creer que nunca hice cake pops? a ti te kedaron fantastico haber si lo intento y me quedan la mitad de divinisimos que a ti.

Conchi dijo...

Ay, Inma, que llevo tooooodo el día pensando en tí! Mi suegra me llamó esta mañana para decirme que tengo un paquete allí (te di su dirección, es más fiable que la mía...) y me tuve que quedar en casa, no pude ir a recogerlo! Estoy en ascuas hasta que llegue mi marido, jijiji! Tienes que probar las bizcobolas, son una pasada, de verdad. Te cuento lueeegoooo!!!

Anónimo dijo...

Lo primero de todo enhorabuena por esos seguidores. Y lo segundo, me encantan las bizcobolas, son siempre un éxito asegurado. Un besazo.

Conchi dijo...

Muchas gracias por tu visita y tu comentario; a mi las bizcobolas me han enganchado, y a mi catador más, que se da una de paseítos al frigo... jeje! Un besote!!!

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